Como enloquecer a tu amante con caricias eróticas

Existe cuantiosos hombres que tienen escasa ideas de proporcionarle excitación sexual mediante lascaricias eróticas a una mujer. De igual forma, muchas mujeres no saben cómo estimular manualmente a un hombre.

Primeramente es sumamente importante conocer las zonas erógenas, principalmente las sexualmente sensibles, del los cuerpo del hombre y la mujer, si quieren disfrutar de las caricias sexualesverdaderamente agradables y totalmente satisfactorias en las relaciones sexuales. Los hombres y las mujeres en su mayoría tienen preferencias eróticas específicas. Por este motivo, las parejas deben experimentar y ofrecerse el uno al otro la guía y la información necesarias para comprender y apreciar sus naturalezas sexuales.

Pocas son las áreas del cuerpo femenino que no son sensibles a las caricias eróticas. El grado de sensibilidad tiende a variar de una mujer a otra. Algunas prefieren que el romanticismo induzca al erotismo En cuanto a los hombres, generalmente reaccionan a las caricias de sus órganos genitales, sin recurrir al romanticismo.

Si bien es cierto, el área de los órganos genitales, es la más sensible a las caricias eróticas. La parte más sensible de los órganos genitales de la mujer es el clítoris. De hecho, el clítoris tiene más nervios sensibles que el glande del pene.

Ahora bien, el extremo del clítoris normalmente sobresale por detrás y por arriba de la abertura de la uretra, en la junta de los labios internos de la vulva. Se puede lograr una excitación realizando un masaje con movimientos suave con uno o más dedos y aplicando una pequeña presión a la vez. Los labios internos y externo que rodean a la abertura vaginal también son muy sensibles y deben ser acariciados con suavidad. Después del clítoris, los labios vaginales son las partes más sensibles de los órganos genitales de la mujer.

El pequeño resalto redondo de la abertura de la uretra en la mujer (entre la abertura vaginal y el clítoris), también es un área muy sensible para algunas mujeres. El más ligero toque de esta área puede avivar un gran placer sexual en las féminas.

El vestículo de la vagina (el área que rodea a la abertura interna de la vagina) es muy sensible. Las caricias manuales genera una excitación enorme a una mujer y hasta hacer que alcance el orgasmo. Por ejemplo, el hombre puede iniciar con sutiles caricias orales del clítoris, los labios de la vulva y el vestíbulo vaginal. Así mismo, con los dedos puede explorar eróticamente el cuerpo de su pareja y realizar caricias sensibles pero firmes. En su excitación el hombre no desde excederse, ejerciendo demasiado presión con las manos.

Penetración profunda

Aunque parezca sorprendente, las partes profundas de la vagina no son tan sensibles como la entrada vagina, por lo que una presión de esas áreas no excita tanto a la mujer como se cree. Se debe esto a que las paredes vaginales tiene pocos nervios erógenos.

Las mujeres normalmente disfrutan de una penetración profunda del miembro viril debido sobre todo a razones psicológicas, aparte del estímulo directo proporcionando por el clítoris y al entrada vaginal. Sin embargo, una penetración profunda de la vagina crea una presión que “tira” de los labios de la vulva y del clítoris, aumentando así el estímulo erótico.

Aumenta también la excitación sexual de la mujer cunado su pareja le acaricia el ano.Tanto los hombres con las mujeres se excitan sexualmente con caricias del ano y de la región anal.

Cómo excitar al hombre

El glande del pene es el área más sensible del órgano genital del hombre, debido a que hay allí un gran número de nervios erógenos. Sin embargo, muchos son los hombres que disfrutan eróticamente de las caricias manuales de sus testículos y de la base del pene. Estas áreas tienen pocos nerviosos de sensibilidad erótica, pero sí responden al estímulo manual.

Una mujer puede comenzar a estimular a un hombre, tomando su órgano con la mano y aplicándole presión hacia arriba, desde el cuerpo hacia el glande o cabeza del pene. Moviendo sus manos con suavidad, aunque de manera vigorosa, en movimientos ascendentes y descendentes por el cuerpo del pene, mientras lo comprime con suavidad, puede ella estimular grandemente al hombre. Si continúa con ese tipo de estímulo, puede hacer que el hombre alcance un orgasmo. Esa técnica puede aplicarse sin un exceso de presión, a fin de que el hombre disfrute de una intensa sensación erótica sin llegar al orgasmo.

En cuanto a las caricias orales, éstas resultan sumamente placenteras para la mayoría de los hombres.

Aparte de los órganos genitales, las partes del cuerpo del hombre y la mujer que reaccionan a estímulos eróticos son todas las aberturas: la boca, el ano, la uretra y las orejas. También son sensibles las áreas en que la piel es muy delicada, como los lóbulos de las orejas y las porciones interiores de las piernas y los brazos. El cuello y la espalda, especialmente a lo largo de la columna, reaccionan eróticamente al tacto. El área del cuerpo entre el ano y los órganos genitales, conocida como perineo, es muy sensible a las caricias, especialmente a los movimientos rápidos y suaves de los dedos.

Las otras partes del cuerpo que reaccionan a los estímulos eróticos de las caricias son las plantas de los pies, las axilas, las palmas de las manos, las piernas, las asentaderas y el abdomen.

Hasta el cabello y los dientes son a veces sensibles, ya que existen nervios en sus bases. El acariciar con suavidad el cabello o hasta el respirar cerca de él puede inducir a una sensación erótica.

Es posible que no baste acariciar algunas de las áreas mencionadas anteriormente para excitar a una persona por completo. Pero sí es necesario tomarlas muy en cuenta durante las caricias preliminares al coito para despertar el erotismo por completo en la pareja de uno. Cuando se crea el ambiente propio para el amor sexual, virtualmente cualquier parte del cuerpo puede convertirse en una zona erógenas. En condiciones ideales, con la pareja que reaccionan fácilmente el uno al otro, el cuerpo entero puede convertirse en una zona erótica total.

Los senos de la mujer merecen atención especial,debido a que son muy sensible y a que generalmente desempeñan un papel importante en la sexualidad. Muchos hombres disfrutan acariciando los senos de sus esposas, ya que esto los excita sexualmente. Pero tal vez sorprenda tanto a los hombres como a las mujeres saber que los senos no son tan sensibles como la gente cree. Hay una tendencia a exagerar la sensibilidad de los senos de las mujeres, debido a que los hombres se excitan mucho viéndolos y acariciándolos. Sin embargo, no todas las mujeres reaccionan intensamente a las caricias de sus pezones de mujeres que alcanzan el orgasmo cuando les besan los pezones. Pero no los generalizar en cuando a esto, ya que no todas las mujeres se excitan sexualmente cuando les acarician los senos. Cada una es diferente.

No muchos saben que las tetillas de los hombre también son eróticamente sensibles. Por lo tanto, las parejas pueden encontrar otro medio de disfrutar de la sexualidad, experimentando la mujer con caricias de las tetillas de su marido.

En breve, casi cualquier parte del cuerpo humano puede ser sensible al estímulo sexual. Esto se aplica especialmente, por supuesto, a esas áreas del cuerpo donde abundan los nervios erógenos. Sin embargo, existen partes insospechadas del cuerpo que son erógenas y que pueden proporcionar gran placer sexual cuando se acarician, si una pareja ha llegado a estado de apasionamiento igual cuando tiene relaciones sexuales. Las parejas que se interesan por crear el ambiente adecuado para la sexualidad y que se encuentran dispuestas a explorar todas las áreas de su cuerpo encontrarán muchas formas de disfrutar al máximo de sus relaciones sexuales.

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